Este texto aborda la problemática de los programas sociales en la Argentina de la década del noventa en adelante, entendiéndolos como la gran paradoja de la globalización en nuestro país. Mientras ésta promete un intercambio desterritorializado, los programas sociales representan una vuelta a la localización, al recorte de poblaciones homogeneizadas y ancladas territorialmente.
Los autores examinan una serie de programas especi-ficos y ponen de relieve los efectos subjetivos de sus operaciones discursivas. El texto no se ancla en los muros de los programas, sino que los aborda para leer en ellos la huella de las transformaciones que han sufrido las políticas públicas y para debatir los síntomas de la fragmentación de las identidades sociales.
En la era de las políticas sociales, el mayor riesgo
-sugieren los textos- no está en el despliegue de programas sociales sino en convertir la contingencia en la fatalidad de la globalización. El peligro es naturalizar un modo de intervención que despoia a la cuestión de la pobreza de sus aristas políticas y legitima una lógica de gestión social cuyo horizonte máximo es multiplicar los programas compensatorios conforme aumenten los problemas derivados de la exclusión. Mientras los mentores de la focalización invitan a abandonar las políticas públicas integradoras por su "alto costo y poca eficacia", este libro analiza el "costo social" de producir sujetos agradeci-dos, asistidos y tutelados.
Silvia Duschatzky es licenciada en Ciencias de la Educación y magíster en Sociología y Análisis Cultu-ral. Trabaja como investigadora en el área de educación de FLACSO y coordina el posgrado en Gestión de las Instituciones Educativas. Además de numerosas colaboraciones en libros y revistas, es autora de La escuela como frontera. Chicos en banda (en colaboración con Cristina Corea) y Maestros errantes, todos ellos publicados por Paidós.